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15.10.2012
 

  

 

En alguna oportunidad quise escribir sobre el reto de educar niños bilingües, ya que como madre hispana vivo esta experiencia en un país de habla inglesa. Pero después llegue a la conclusión que el reto esta en educar hijos con mentalidad multicultural, tolerantes ante las diferencias.

 

¿Pero que es realmente ser multicultural? No basta con aprender otro idioma o comer los platos típicos de otra cultura para sentirse una persona de mente multicultural. Ser multicultural en el mundo global es aprender a convivir con personas de diferentes culturas, religiones e ideologías.

 

En teoría cada país debe ser un reflejo de las culturas que lo habitan. Por ejemplo, Estados Unidos, Inglaterra, Australia o Canadá donde hay decenas de inmigrantes de diferentes partes del mundo, el ser multicultural implica respetar la pluralidad de culturas existentes. El inmigrante debe aprender un nuevo idioma, nuevas costumbres y formas de ver la vida, pero así mismo quienes son residentes del país deben estar abiertos para enriquecerse con nuevas perspectivas culturales.

 

Precisamente este 17 de octubre se celebra en la mayoría de los países latinoamericanos, el día de la raza, que nació para conmemorar el encuentro entre Europa y América tras la expedición de Cristóbal Colón. Pero en esta fecha más que celebrar el llamado “Encuentro de dos mundos”, se debe enfatizar la importancia de que nuestros hijos sepan acoger, respetar y valorar al indígena, negro, mulato o mestizo y a toda persona sin importar su trabajo o condición social.

 

En argentina, precisamente existe un proyecto de decreto del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), con el fin modificar el nombre del Día de la Raza por Día de la Diversidad Cultural y pienso que este nombre es más apropiado ya que busca resaltar la diversidad de lenguas (incluyendo las lenguas indígenas), la diversidad de razas y culturas.

 

Esto sin duda es una tarea que debe comenzar por el testimonio de nosotros los padres. Si bien estudiar otro idioma es importante, es mucho más importante enseñarles a los hijos desde pequeños a crecer sin prejuicios, a saber respetar aquel que se viste, habla o vive diferente. Según estudios de hijos de inmigrantes, los niños que son expuestos a personas de diferente cultura, edad, color o clase social tienen una visión más amplia de la vida y aprenden a ser más tolerantes hacia los distintos grupos étnicos. Es importante aclarar que cuando se habla de los grupos étnicos, significa respeto a las minorías culturales, no opciones de vida como la de juntarse con una persona del otro sexo.

 

Para quienes vivimos en un país extranjero, el reto esta en educar a los hijos para que se sientan orgullosos de sus propias raíces, pero así mismo sean capaces de integrarse con la cultura predominante. Así que la tarea es estar orgullosos de quienes somos, pero así mismo poder amar y valorar a todos a aquellos que son diferentes a nosotros y descubrir que las diferencias nos enriquecen y nos edifican como seres humanos.

 

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luisablogLuisa Fernanda Marín

Comunicadora Social y Periodista de la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín, Colombia. Ha trabajado en el portal Colegios virtuales y como Coordinadora del proyecto Código de Acceso del periódico El Tiempo y la Fundación Antonio Restrepo Barco. En el 2006 emigró a Nueva Zelanda donde terminó un diplomado y un posgrado en el área de Gestión Humana en la Universidad de Canterbury. Actualmente es madre de tres hijos y ciudadana Neozelandesa. Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.

 

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