Por Regino Navarro Ribera/LaFamilia.info - 19.05.2020

La nueva normalidad es ese estilo nuevo de vida que nos impone la presencia del coronavirus en la vida personal, familiar, profesional y social, después de que pasó la etapa de encerramiento forzoso y se regresa paulatinamente a la normalidad.

En estas líneas se señalan características de esta nueva situación referidas a los centros educativos. Algunas ya vienen de atrás y se acentuarán. Otras son nuevas y han venido para quedarse de forma definitiva o transitoria. En la educación pública el proceso a la nueva normalidad tendrás una evolución más lenta. 

1. En una próxima etapa, cercana, el colegio en casa seguirá primando sobre la modalidad presencial. Las secciones o grados estarán unos días en el centro educativo y otros en la casa. La convivencia de profesores y alumnos durante los días presenciales será más dinámica y con objetivos mejor definidos. 

2. De la importancia de tener unas buenas instalaciones físicas se pasará a la necesidad de poseer una buena plataforma informática que haga posible la educación virtual. La tecnología educativa adquiere gran relevancia.

3. Los profesores deberán acelerar con urgencia su formación en esta nueva tecnología, para llevar a cabo una educación remota de calidad, que es algo distinto a impartir una clase virtual y dejar tareas al alumno para la casa. 

4. Las empresas, que les interesa el teletrabajo para determinados puestos de trabajo, aceptarán cierta flexibilidad para que los padres y madres de familia puedan acompañar a sus hijos en los procesos educativos en casa. Será un equilibrio costoso de conseguir entre empresa y colegio, con la familia en medio.

5. Se requiere repensar los costos de la educación privada para facilitar la educación de calidad a más familias. Bastante procesos podrán estar tercerizados. Podría haber agrupación o fusión de colegios. La nueva normalidad en los centros educativo comporta una nueva logística de la movilidad.

6. La enseñanza que imparten los profesores perderá protagonismo frente al proceso de aprendizaje de los estudiantes, que es el auténtico protagonista de la educación. Las tareas, que dejarán de llamarse así, estarán encaminadas a aprender a manejar la información para convertirla en conocimiento.  

7. La nueva tecnología educativa facilitará mejor que ahora el uso de diversas metodologías: sesiones en grandes grupos, talleres lúdicos, laboratorios virtuales, expresiones artísticas... También permitirá el trabajo personalizado del profesor con un alumno de forma individual o con pequeños grupos, que tendrán mayor relevancia.

8. Los papás necesitarán formación adecuada para un nuevo rol educativo, centrado en la persona del hijo más que en el aprendizaje, en los valores más que en el conocimiento, en las habilidades más que en las evaluaciones.  La formación del criterio y la autonomía serán retos importantes.

9. Las evaluaciones estarán diseñadas para verificar qué habilidades, actitudes y vivencias han adquirido los estudiantes, más que para averiguar qué conocimientos no han adquirido todavía. El desarrollo de las habilidades de pensamiento, y la valoración de estas, será clave en el proceso educativo. 

10. El mayor reto lo constituye la educación preescolar. La presencialidad será parcial y no siempre en las instalaciones del centro. Se puede recurrir a instalaciones deportivas, parques, centros de entretenimiento, etc., de vez en cuando, para disminuir la concentración de personas en unas mismas instalaciones.

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Por Regino Navarro Ribera
Fundador de LaFamilia.info. Español de nacimiento pero colombiano de adopción. Coach profesional, especialista en Ciencias del Comportamiento, estudios en Orientación y Consejería, profesor, conferencista y autor de varios libros. Twitter: @ReginoNavarroR

 

 

 

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